¿Qué tan indiferentes eres?

Por. María Andrade Rodríguez 
Lic. filosofía. Consultora organizacional
Escrito el 1 de marzo 2015 
¿Tienes tiempo para amar, servir y odiar? 
Cuándo nos preguntamos esto es probable que estemos en un limbo o protegidos en un cascarón como el de las tortugas?. 
Más allá del amor a la familia, hay un mundo que nos demanda acción y la rutina, la carencia de un verdadero amor patrio nos incitan a evadir nuestra realidad como sí fuera la de otros y no la de todos. 
Muchos piensan que el legado que deben dejar a sus herederos son bienes materiales y los bienes del espíritu pasan a un tercer nivel o quizás jamás se pensaron ni imaginaron.
La historia nos demuestra que las grandes almas son aquellas que pensaron,  vivieron centrados en la universalidad de su trascender en esta vida. Solo espíritus llenos de sacrificio, amor, determinación y grandeza fueron capaces de transformar sus circunstancias adversas en grandes retos que luego se consolidarían en victorias para la paz y restauración de vidas y naciones asoladas por la barbarie humana. 
Venezuela hoy nos demanda regresarle su historia de bravo pueblo que “el yugo lanzó, la ley respetando, la libertad y honor”; virtudes al parecer puestas de lado por millones de venezolanos que han construido su propio muro de los lamentos e indiferencia ante unos pocos que nos quieren miserables y parásitos de sus migajas. 
¿Quieres vivir amando a tu familia, país, sirviéndoles, o como miserable parásito que, en lugar de reinventarse con fiereza, virtud y honor; por cobardía, se aliena a sí mismo, a las futuras generaciones y a su país presos de la represión y opresión socialista que mata toda humanidad y virtudes que nos conduce a la libertad y prosperidad?.

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