Hambre y sed de justicia

Tengo hambre y sed de justicia en nuestra vapuleada Venezuela por 14 años de un gobierno socialista de corte radical, y que amparado en la atención a los más pobres hace uso grosero y carente de toda ética pública y de servicio al país, hace usos de las finanzas públicas para financiar guerrillas, engordar las arcas de los burócratas que se han enriquecido de manera despiadada y han hecho del acoso laboral y político una constante en el ejercicio de sus funciones. 
Por so, hoy decimos ¡¡¡¡NO AL FRAUDE!!!!!, a la violación de la constitución de la República, la violencia desatada por el régimen venezolano apoyado por el terror del Castro comunismo, militares vende patria y todos los enchufados que mancillan y ultrajan sus instituciones, reverenciando la violencia y desacatando la voluntad sagrada de cambio que se materializó en Venezuela el 14 de Abril. Es insólito que se diga que vivimos en democracia cuando no podemos protestar pacíficamente. El miedo a quienes se suponen deben protegernos como la fuerza armada venezolana nos amedrentan con sus armas y desmanes, al igual que las hordas desenfrenadas y violentan del régimen materializadas en sus motorizados rojos y encapuchados que se valen de la impunidad para el atropello indigno y desmoralizante de quienes decidimos protestar para que se cuenten uno a uno los votos sufragados el 14 de Abril del 2013. Este es un derecho constitucional que debe cumplirse para todos, incluidos aquellos a quienes el espurio presidente llama “patas en el suelo”. 

Es probable que la justicia se haga esperar y nosotros tendremos la paciencia y al mismo tiempo la firme contundencia y la determinación de quienes saben cuales son sus objetivos. Nuestro espíritu no se amilana ante el poder fétido y nauseabundo de los usurpadores de la legitimidad que nos corresponde porque esa fue nuestra voluntad expresada bajo la sombra de la amenaza constante, el escarnio, y vegación publica por nuestros ideales. 

Venezuela tiene un líder en nuestro Henriquez Capriles Radonsky y él nos alienta e inspira a no dejarnos menguar. Él fue capaz de aglutinar millones de voluntades, muchas de ellas antes indiferentes frente a los desmanes políticos, económicos y sociales de un régimen totalitario con catadura absolutista y un dogmatismo oscurantista, pertinaz y excluyente de la libertad de pensamiento y acción de nuestras  ideas y exigencias. Algún día no muy lejano la verdad resplandecerá porque como dijo nuestro gran Dr. Jesus Enrique Lossada  “Después de las nubes, el sol”.